La calidad obtenida durante el proceso de elaboración en la almazara va a determinar el tratamiento posterior del producto.
Si el aceite de 'Oliva' es de 'Calidad Virgen' o 'Virgen Extra' puede ser comercializado directamente, bien por la misma almazara o en otras plantas de envasado.
Sin embargo si se trata de aceite Lampante, su destino es la refinería, con la finalidad de eliminar los defectos químicos y organolépticos.
El aceite de Ooliva Refinado' así obtenido, se mezcla con aceites vírgenes para comercializarse bajo la denominación 'Aceite de Oliva'.
Por término medio, el 30 ciento del aceite producido en una campaña es de la categoría virgen extra, un 40 por ciento virgen, y un 30 lampante.